Lo que debe saber sobre los perros si tiene un niño en casa

Muchos perros son entregados a los refugios cuando una familia tiene un bebé o cuando se compra un cachorro para un niño. Los propietarios de un animal de cuatro patas temen que el animal haga daño al bebé o simplemente no tienen tiempo suficiente para alimentarlo. Por eso es muy importante dedicar mucho tiempo a pensar si su mascota recibirá suficiente tiempo y atención antes de comprarla. La raza del cachorro también es muy importante. Pequeño o grande Si tienes un niño pequeño en casa y estás pensando en tener un cachorro, debes elegir la raza con mucho cuidado. La mayoría de las veces, los padres jóvenes piensan que un cachorro pequeño será un gran compañero para su hijo y que ambos se divertirán jugando y retozando. También se elige una raza pequeña porque es menos engorrosa: no hay que pasearla tres horas al día, no ocupa demasiado espacio en el piso, etc. Sin embargo, son los cachorros pequeños los que pueden causar más problemas a los padres, ya que suelen tener miedo de los niños, se sienten inseguros a su alrededor y, en general, no quieren ser amigos de sus hijos. Pelo largo o corto Algunas razas de perro, como los schnauzers, los terriers y los caniches, sólo tienen buen aspecto si se les cepilla el pelo cada pocos meses. Sin embargo, se trata de una preocupación adicional para la que las familias con niños no siempre tienen tiempo. El cuidado del pelo de un perro de pelo corto es mucho más sencillo y no requiere mucho esfuerzo para mantenerlo limpio y con buen aspecto. Ventajas de un perro Crecer con un perro da a su hijo la oportunidad de ver el comportamiento y los hábitos de los animales desde una edad temprana: lecciones impagables sobre la naturaleza. Por supuesto, cuando un niño ve a sus padres dar de comer, bañar y pasear al perro, aprende a responsabilizarse del animal. Tener un perro en casa hace que el niño crezca en un ambiente menos estéril y, al mismo tiempo, más resistente a las influencias ambientales, porque quizá no haya nada tan perjudicial para un niño pequeño como un ambiente estéril. Por tanto, si el perro se desparasita regularmente, el niño puede jugar y dormir con él sin peligro. Para un hijo único, un perro puede ayudar a aliviar la soledad, ya que el cachorro interactúa con su amigo de cuatro patas como un igual. La mayoría de las veces, el niño prefiere salir al aire libre porque pasear al perro no es aburrido. Desventajas A menudo, los padres jóvenes sobrestiman sus recursos y adquieren un cachorro pequeño cuando tienen un bebé de varios meses. Un bebé necesita mucha atención en sus primeros meses de vida, y un cachorro también, por lo que a veces se nos pasa por la cabeza la idea de regalar un cachorro a alguien. Si ya tienes un cachorro y hay un bebé en casa, intenta compartir responsabilidades con tu marido u otros miembros de la familia para que haya tiempo suficiente tanto para el bebé como para la mascota. A veces es necesario mantener al perro alejado del niño, porque si se le gruñe y azota constantemente, empezará a esconderse del cachorro y no le hará caso. Un animal de cuatro patas que ha sido “atormentado” por un niño puede empezar a destrozar la casa o a orinar y defecar en ella como forma de aliviar el estrés. Por eso es muy importante enseñar a tu hijo desde pequeño que un perro no es un juguete. Hay que mostrar al bebé que el animal siente dolor, está cansado y quiere tumbarse tranquilamente en su cama, que debe estar fuera del alcance del bebé. Los dueños de perros inexpertos a veces no se dan cuenta de que un niño está sobreexigiendo a su compañero de cuatro patas, y el perro ya está mostrando signos de estrés. Un perro alterado puede incluso morder a un niño. Por lo tanto, nunca hay que dejar solos a un niño pequeño y a un perro: hay que observar cómo se comporta el perro con el niño y el niño con el perro. Y dejarle claro al perro desde el principio que el niño está por encima de él.